25 de diciembre de 2014

Avance imparable


(Escrito el 21.05.09 en mi diario de “Reflexiones esporádicas”)

Me satisface observar el avance continuo del mundo hacia cotas de libertad cada vez mayores, porque, aunque lo haga con lentitud, el progreso es imparable.
Ese caminar hacia adelante no es de ahora, siempre ha existido; lo que sucede es que como la vida del ser humano es tan corta, parece como si cada uno de nosotros sólo fuera consciente de las modificaciones que se realizan durante su existencia. Las anteriores las advertimos como un gran paquete de libertades que siempre hubiera estado ahí, cuando en realidad es el fruto del esfuerzo colectivo de muchas generaciones, a través de los siglos. De la misma manera, el resultado de nuestro empeño por  avanzar en esa dirección llegará a quienes nos sucedan como algo incluido en una gran bola, que seguirá rodando sin detenerse hacia la utopía igualitaria.

Es cierto que el avance es lento, como he dicho, e incluso sufre con frecuencia retrocesos, porque la reacción en contra es fuerte  y se opone con tenacidad al progreso. Pero la suma algebraica de impulsos hacia adelante y repliegues circunstanciales es siempre positiva y no hay quien la detenga.
La reacción proviene de muchos lugares, de todas aquellas organizaciones, laicas o religiosas, políticas o gremiales, que temen que los cambios puedan perjudicar sus intereses. Pero esa es la historia de la humanidad, la lucha de unos por avanzar y la de otros por frenar, si no retroceder. Y en esa lucha el progreso se abre camino con tesón, aunque en ocasiones alguno tenga que dejarse la piel a tiras.

Conviene meditar sobre este asunto con frecuencia, para no caer en el desaliento que produce contemplar la reacción de algunos sectores contra ciertas leyes progresistas. Y la conclusión de ese análisis será que es inútil oponerse al progreso, porque aunque los reaccionarios consigan frenar momentáneamente su avance, nunca lograrán detenerlo del todo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Cualquier comentario a favor o en contra o que complemente lo que he escrito en esta entrada, será siempre bien recibido y agradecido.